El centro tecnológico de Palmas Altas fue diseñado por RSHP en asociación con luis vidal + arquitectos, y las zonas verdes fueron diseñadas por la paisajista María Medina Muro junto con el arquitecto Gregorio Marañón Medina, con la intención de recuperar los valores tradicionales de los jardines hispanoárabes.

El Campus Palmas Altas se levanta sobre un solar de 42.000m2 y tiene una superficie construida de 96.000m², además de una edificabilidad de 50.000m2. Se estructura en siete edificios organizados en torno a un espacio abierto central, practicable a distintas alturas, que hace referencia a la arquitectura tradicional andaluza, y que permite organizar las conexiones entre edificios y espacios circundantes según un esquema en planta de secuencia en espina, alternándose llenos y vacíos, así como pavimentos y zonas verdes, dotando así al conjunto del Centro de un equilibrio de luces y sombras con un frescor vegetal saludable, además de reducir el sabido impacto de islas de calor común a este tipo de sedes de gran tamaño.

La preocupación por el medio ambiente se plasma tanto en la disposición de los edificios para aprovechar la sombra que unos arrojan sobre otros y en las fachadas totalmente acristaladas que facilitan la entrada de una gran cantidad de luz natural en el interior, modulada por parasoles de lamas fijas. Asimismo, cuenta con tecnologías medioambientales de última generación que contribuyen a minimizar el consumo energético: una planta generadora de energía, paneles fotovoltaicos, sistemas de climatización e iluminación eficientes, pilas de hidrógeno, etc., en un claro compromiso con la lucha contra el cambio climático y una apuesta por la arquitectura sostenible. Cabe destacar que el proyecto ha obtenido una calificación LEED Platinum, siendo el primero en conseguirlo en España.

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